WAR HORSE (CABALLO
DE BATALLA)
DIRECTOR: Steven Spielberg.
DURACIÓN: 140 min
Queridas plumas,
según mi opinión, esta película se merece todos mis elogios. Se ha convertido
en mi película favorita, cada escena me absorbía y me hacía desear más y más.
Es una historia
que trata de esperanza, lealtad y que llega a tocar la fibra más sensible de
cada uno. Se desarrolla en Inglaterra, durante la primera guerra mundial.
El principio
narra como el padre de la familia (Ted Narracott) compra a Joey, un caballo salvaje, en la
subasta del pueblo. El problema que supone esta compra es que subastó contra su
casero, dejándose así el dinero del alquiler en el pequeño Joey. Su mujer, (Rosie Narracott) al enterarse, decide devolver al caballo, pero su hijo, (Albert Narracott) la
convence de lo contrario y le promete que entrenará al caballo hasta domarlo.
Finalmente, Albert y Joey, consiguen labrar el campo de la granja, para que les
dé el dinero suficiente para pagar al casero. Pero una tormenta estropea la
cosecha y tras haber sido anunciada la guerra de Inglaterra contra los
alemanes, deben vender a Joey a un oficial. Albert se siente abatido por tener
que despedirse de su amigo, y el oficial le promete devolvérselo algún día. Y
en ese momento empieza la segunda trama de la película, en la que Joey une
diferentes historias de superación.
El final de la
película es increíble, con el reencuentro de Joey y Albert en plena guerra. Esa
parte me hizo llorar de la emoción.
Es una película
que nos hace sentir de numerosas maneras, y desde luego el director se merece
la fama que tiene. La historia está basada en una premiada obra teatral de
Broadway, y está perfectamente adaptada a imágenes.
Se la recomiendo
a un público desde joven hasta mayor, pero tener cuidado con algunas escenas de
guerra, no muy indicadas para los más pequeños.
PUNTUACIÓN: 9. (Habría deseado alguna historia de amor
entre líneas)
<< Hay días
grandes y días pequeños. ¿Qué clase de día será hoy?>>
(Increíble,
espectacular, imprescindible)
Lena